Incendios de nieve
A veces sientes como el mundo te quema. Te quema el pecho, el alma, los sentidos. Te consumes en tus propias mentiras, en tu falso bienestar. Y no te has dado cuenta de que has arrasado con todo, y con todos. Destruiste a otros para no acabar contigo misma, y crees que eso está bien: al menos te has salvado. Solapas tu dolor con el llanto que has dejado al pasar, como un huracán. Porque mientras causes estragos, te sigues sintiendo viva. Y sigues creyendo que has ganado. Te equivocas una, y otra, y otra vez. Tú también acabarás consumida en tus propias llamas, porque no habrás dejado con vida a nadie dispuesto a apagarlas.
Comentarios
Publicar un comentario